El proyecto de Suba presentó un reto estratégico, al implicar la adquisición y adaptación de una operación existente. Implementamos un modelo que nos permitió integrar una flota eléctrica dentro de un contrato vigente, en colaboración directa con el concesionario. Este enfoque demostró nuestra capacidad para optimizar sistemas operativos preexistentes sin comprometer la eficiencia ni la sostenibilidad.
La clave del proyecto fue la alineación con los objetivos del concesionario, lo que requirió una planificación precisa y un enfoque adaptable. Diseñamos soluciones que garantizaron el desempeño óptimo de la flota eléctrica y resolvieron los desafíos operativos propios del transporte público.
Además, este proyecto fortaleció nuestra experiencia en asociaciones público-privadas y consolidó relaciones estratégicas dentro del sector. Suba refleja nuestra capacidad de innovación y generación de valor en entornos operativos complejos.